La reunión se celebró la víspera de la Nochevieja, fijada por Pionyang como fecha límite para que Washington suavice su posición y haga concesiones en las conversaciones sobre desnuclearización.

Mientras tanto, desde Washington señalan que si Corea del Norte prueba un misil de largo alcance o un misil nuclear, la Administración Trump se sentiría decepcionada y Pionyang recibiría una respuesta correspondiente.

“Si Kim Jong-un toma ese enfoque nos decepcionará extraordinariamente y mostraremos esa decepción”, indicó este domingo Robert O’Brien, asesor de seguridad nacional norteamericano, en una entrevista para ABC.

Visitas : 4

admin

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *