El Gobierno de Canarias no descarta la llegada de una tasa ambiental al turismo tras las recientes manifestaciones por parte de diferentes plataformas de activistas. Formaciones como el PSOE y Nueva Canarias también están presionando para que lleguen soluciones (Canarias: los antiturismo se movilizan contra su principal motor económico).
Según informa Canarias7, el presidente insular, Fernando Clavijo, ha apuntado que la convocatoria de concentraciones el próximo 20 de abril en Tenerife, Gran Canaria, Fuerteventura, Lanzarote y La Palma supone “una oportunidad” para revisar el “modelo turístico” del archipiélago (Canarias: los factores que han conducido a una situación límite).
En este sentido, ha asegurado que “se hablará de la tasa” en la próxima Conferencia de Presidentes de Cabildos, que tendrá lugar el 30 de abril. Mientras tanto, aboga por “no politizar” las movilizaciones, ya que sólo sirve para “perder la oportunidad” de generar diálogos constructivos.
Sobre esta llegada de soluciones también se ha pronunciado el candidato de Coalición Canaria al Parlamento Europeo, Carlos Alonso, quien, además de defender la introducción de una tasa turística, también es partidario de aplicar un impuesto a los nuevos residentes.
Entiende la indignación de los ciudadanos, ya que se ha generado una “congestión” en varias islas por el incremento de la población, que ha crecido en más de medio millón en los últimos 25 años. En su opinión, esta tasa es necesaria porque la llegada masiva de residentes se traduce en “un impacto, una huella ecológica, una demanda de nuevos equipamientos, de vivienda, de sanidad, de educación y de infraestructura”.
“Creo que hay posibilidades. En el marco comunitario, que promueve la libertad de circulación de personas y de capitales, Canarias tiene un artículo en el TFUE que le permite tener este tipo de medidas, que son viables”, ha concluido.