El presidente de Canarias, Fernando Clavijo, viene siendo víctima de escraches por parte de los ‘antiturismo’ en el marco de las constantes protestas contra el modelo turístico del archipiélago en las últimas semanas (El pulso de los ‘antiturismo’ en Canarias: huelga de hambre como “último recurso”).
Según informa El Confidencial, varios grupos de activistas del colectivo “Canarias Se Agota” han llegado a personarse en la puerta de su domicilio, donde reside con su familia, entre ellos dos menores. Lo hicieron al grito de “Clavijo traidor, sal al balcón”, y luciendo pancartas con el mensaje “tuvimos que ir hasta tu casa porque estás destruyendo la casa de tod@s”.
El presidente también fue víctima de amenazas durante la pasada concentración del 20 de abril tachándole de “rata”. El citado medio confirma que en la manifestación se escucharon proclamas como “violencia es dejar sin casa a quien no tiene na’, tú sigue destruyendo que acabaremos en tu casa”, o como “lo que no paguen en vida, lo van a pagar en muerte” (Canarias: protestas multitudinarias contra el turismo de masas).
Clavijo no ha tardado en responder a estos ataques, señalando que “respeto las manifestaciones y el derecho a la huelga, lo que pido y ruego es que mi familia no tenga que verse afectada porque tienen edificios de Presidencia, instituciones donde pueden ejercer sus acciones sin necesidad de violentar la intimidad de mi familia”.
Estas presiones hicieron que se reuniera la semana pasada con representantes de la asociación, aunque no con demasiado éxito. Su portavoz, Víctor Martín, ha criticado que “mostró absoluta indiferencia”, por lo que “continuarán en huelga de hambre”. No obstante, se ha desconvocado una nueva quedada a las puertas del domicilio del líder del ejecutivo.
Como viene publicando Preferente, el objetivo de los activistas es la aprobación de una moratoria turística, así como paralizar de forma definitiva algunos macroproyectos turísticos. Entre ellos se encuentran los de Cuna del Alma y La Tejita (Tenerife), dos de las zonas en las que se ha agudizado en mayor medida el complot a la llegada de visitantes.
En el caso de la primera, se quiere bloquear la construcción de un hotel de cinco estrellas, cuyo proyecto se inició en 2015, pero aún continúa siendo un esqueleto de hormigón por las constantes trabas impuestas. Por su parte, en Cuna del Alma, los ecologistas se oponen a un macrorresort de 400.000 metros cuadrados en las playas del Puertito de Adeje, con apartamentos, villas de lujo, playa semiprivada, etc.