Revés para Airbus: retraso de hasta un año con el A321XLR
La EASA requiere al fabricante la introducción de cambios en esa estructura antes de certificar el aparato
La autoridad aeronáutica considera que el depósito de combustible debe ser de un metal más pesado y resistente que el utilizado
Airbus se enfrenta a un retraso de varios meses en el desarrollo del nuevo Airbus A321XLR que inicialmente preveía entregar a sus clientes a partir de 2023. La EASA está negociando con el fabricante cambios en la parte baja del fuselaje para reducir el riesgo de incendio. Existe la posibilidad de que hubiera que reducir su alcance, actualmente previsto en los 8.700 kilómetros (La construcción del A321XLR resumida en 20 imágenes).
El avión, como es bien conocido, es un superventas antes de que haya llegado a volar la primera unidad, que está previsto pueda despegar este 24 de mayo (El nuevo Airbus A321XLR volará el próximo 24 de mayo).
Como es de imaginar, el A321XLR tiene problemas con el depósito de combustible que es más grande de lo habitual. De hecho, tiene varias partes, alguna de las cuales se sitúan en la parte central del fuselaje. La EASA está exigiendo al fabricante la introducción de cambios en esa estructura antes de certificar el aparato.
Al parecer, según indican fuentes no oficiales, la estructura se ha diseñado con composite, que tiene muy poco peso. La autoridad aeronáutica considera que el depósito debe ser de un metal más pesado y, lógicamente, resistente, así como más largo. Un rediseño de este tipo, perfectamente posible porque la estructura de la familia del 320 lo permite, exigirá un periodo de entre seis y nueve meses, con sus consecuencias en la certificación y, por supuesto, en la puesta del avión en servicio.
Hay algunas cuestiones adicionales que están sobre la mesa, que podrían llevar incluso a que sea necesario un año de trabajo, pero al parecer es probable que con la primera parte de las modificaciones el avión pudiera llegar a ser certificado (Así es el A321XLR, la joya de Airbus que puede hacer historia).
Oficialmente, EASA no ha querido hacer comentarios, limitándose a señalar que el A321XLR es un avión en proceso de certificación y que no ofrecerá detalles sobre lo que es un trabajo normal que puede implicar modificaciones. El fabricante de aviones, igualmente, dijo que estaban negociando y que no podían hacer comentarios.
En su momento, Boeing había expresado su preocupación por los riesgos del avión de Airbus, aunque es verdad que Boeing tiene muchas más cuestiones de las que ocuparse sin necesidad de acudir a su rival.